Hoy es un día mágico, es el día del equinoccio de primavera. Un día de comienzos de cosas extraordinarias. Se dice que en la antigüedad, este día era de festividades en torno a la naturaleza, pues llegaba el momento de cocechar lo sembrado, el momento del florecimiento.
También se celebraban rituales de fertilidad para los hombres y para la capacidad de reproducción en las mujeres. En la mayoría de las culturas del pasado, en las fiestas de bienvenida de la primavera se llevaban a cabo rituales sexuales, para recibir la gracia de los Dioses mayores, representados casi siempre, por un hombre y una mujer que formaban una unión, para beneficio de quienes le adoraban.
A mí me gusta pensar que cualquier día puede ser mágico, pero sin dudas hoy la naturaleza nos regala un momento especial, un momento para que nuestros sueños se cumplan, para que pidamos por ellos. Este equinoccio de primavera marca el renacer de todo lo bello que hay en nosotros...
Liú Santiesteban
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